¿Cómo funciona el desahucio por expiración del plazo?

¿Sabías que más del 60% de los arrendamientos en España terminan con algún tipo de desahucio o desalojo? Según un informe del Consejo General del Poder Judicial, las reclamaciones relacionadas con desahucios y conflictos de arrendamiento ocupan una parte importante de los procedimientos civiles en el país, lo que refleja la magnitud de este problema.

Una de las causas más comunes es el desahucio por expiración del plazo, un procedimiento que, aunque parece sencillo, puede volverse complicado si no se gestiona de manera adecuada. Si eres propietario o inquilino, este artículo te guiará paso a paso por este proceso.

¿Qué es el desahucio por expiración del plazo?

El desahucio por expiración del plazo se refiere al procedimiento legal mediante el cual un propietario busca recuperar la posesión de su inmueble cuando ha finalizado el contrato de arrendamiento. 

Este tipo de desahucio ocurre cuando, tras la notificación de la finalización del contrato, el inquilino decide no abandonar la vivienda o el local alquilado.

Por ejemplo, imagina que el contrato de arrendamiento de tu vivienda terminó un 31 de octubre, y el inquilino, a pesar de ser informado con meses de antelación, decide quedarse. En este caso, puedes iniciar un procedimiento judicial para recuperar tu propiedad, lo que es en esencia, el desahucio por expiración del plazo.

Procedimiento de desahucio por expiración del plazo

El primer paso de este procedimiento es enviar un aviso formal al inquilino, informando sobre la finalización del contrato. Este aviso suele hacerse mediante un burofax con acuse de recibo, ya que este medio no solo garantiza que quede constancia legal del requerimiento, sino que también proporciona una prueba sólida ante posibles disputas judiciales.

A diferencia del correo electrónico o una carta, el burofax permite certificar tanto el contenido del mensaje como la fecha en la que fue entregado al destinatario.

Si el inquilino no abandona el inmueble en el plazo solicitado, el propietario debe presentar una demanda en el Juzgado de Primera Instancia correspondiente al domicilio del inmueble. En este documento se deben detallar los hechos, se adjunta el contrato de arrendamiento y las pruebas de notificación.

Una vez presentada la demanda, el juez citará a ambas partes a una audiencia, donde el arrendador deberá demostrar que el contrato ha expirado y que se notificó al inquilino correctamente. El inquilino, por su parte, podrá expresar los motivos de oposición al desahucio por expiración del plazo, como irregularidades en el procedimiento o una renovación tácita del contrato.

Por último, si el juez falla a favor del propietario, se dictará una sentencia que fija una fecha para el desalojo. Si el inquilino no abandona voluntariamente el inmueble, se procederá al lanzamiento judicial.

Motivos de oposición al desahucio por expiración del plazo: Lo que debe hacer el inquilino

Aunque el propietario tenga derecho a recuperar su inmueble, el inquilino podrá oponerse al desahucio bajo ciertas circunstancias, entre ellas:

• Renovación tácita del contrato: si el propietario permite que el inquilino continúe en la vivienda tras la expiración del contrato, podría entenderse que hay una prórroga implícita. Esto puede suceder, por ejemplo, si el inquilino sigue pagando y el propietario acepta los pagos sin notificar la finalización del contrato previo a la finalización del mismo.
• Irregularidades en la notificación: si el aviso de finalización no se hizo correctamente o dentro de los plazos legales establecidos, el inquilino podría alegar que no fue informado de manera adecuada. Es crucial que el propietario conserve pruebas como burofaxes o documentos que acrediten la comunicación.
• Condiciones del contrato: si el contrato contiene cláusulas ambiguas o contradictorias que puedan interpretarse de diferentes maneras, el juez podría considerar válidos los argumentos del inquilino.
• Situaciones de vulnerabilidad: según la Ley de Vivienda 12/2023, en casos de vulnerabilidad económica o social demostrada, el lanzamiento podría ser suspendido para permitir al inquilino buscar una solución habitacional alternativa. Este punto es especialmente relevante en el contexto actual, donde la protección de derechos sociales ha tomado un papel destacado en los procesos legales, en especial, para el desalojo de okupas.

Cambios relevantes con la Ley de Vivienda 12/2023 que afectan el desahucio por término de plazo

Con la entrada en vigor de esta ley, se han implementado nuevas medidas que afectan el procedimiento de desahucio por expiración del plazo. Por ejemplo, se introdujo la obligación de notificar a los servicios sociales en caso de que el inquilino se encuentre en una situación de vulnerabilidad. Además, los jueces ahora tienen la facultad de suspender temporalmente el desalojo para permitir al arrendatario solucionar su problema de vivienda.

También se han implementado plazos más flexibles para que los inquilinos presenten pruebas de su situación, lo que podría extender el proceso en ciertos casos.

Consejos prácticos para arrendadores

• Prepara un contrato claro: asegúrate de que el contrato especifique con claridad las fechas de inicio, finalización y las condiciones de renovación.
• Documenta todas las comunicaciones: guarda copias de los burofaxes y cualquier intercambio de correos o mensajes relacionados con el contrato.

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¿Cuándo es necesario un desahucio por expiración del plazo?

El desahucio por expiración del plazo puede parecer un proceso complejo, pero con la información adecuada, es posible resolverlo de manera eficiente. Pero, ¿te has preguntado cuánto tiempo y dinero podrías ahorrar con una solución más directa? Como mínimo, 3 meses de gestiones judiciales demorados. Imagina evitar el estrés del proceso judicial contratando a una empresa desokupa.

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De igual manera, si tienes segundas residencias con problemas de ocupación ilegal, también puedes consultar nuestros últimos artículos para saber cómo desalojar okupas rápidamente.