¿Cómo afecta la suspensión de desahucio a los propietarios?
Uno de los temas más frecuentes en el imaginario de los propietarios de viviendas, en especial los de segundas residencias es la temida suspensión de desahucio. No solo por lo que implica no poder desalojar a los ocupantes de tu casa de vacaciones o de alquiler, sino también por la incertidumbre de saber cuándo terminará dicha suspensión.
¿Quieres saber más al respecto? Te lo contamos a continuación.

¿Qué es la suspensión de desahucio?
La suspensión de desahucios en España fue una medida implementada por el gobierno, inicialmente como respuesta urgente a la crisis sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19. Crisis que, además, repercutió en la economía de los ciudadanos, los cuales terminaban en estado de vulnerabilidad y no podían cumplir con el pago de sus alquileres.
Esta medida, desde ese momento ha evolucionado hasta convertirse en una herramienta clave para proteger a las personas en situación de vulnerabilidad económica y social. Pues es un mecanismo que busca evitar la expulsión de miles de familias de sus hogares mientras estén en estado económico crítico.
No obstante, esta suspensión ha sido objeto de sucesivas prórrogas debido a la persistencia de la precariedad en amplios sectores de la población.
De hecho, a través del Real Decreto-ley 9/2024, de 23 de diciembre, el Gobierno volvió a extender esta suspensión hasta finales de 2025. Por lo que, esta polémica decisión ha dado pie a debates sobre los efectos secundarios en el mercado de alquiler y sobre cómo algunos grupos se aprovechan de esta normativa para ocupar viviendas de forma ilegal.
Requisitos para obtener la suspensión de desahucio
Para estar protegido por el decreto de suspensión de desahucio la persona debe demostrar que tiene ingresos familiares limitados, estos pueden ser de 3 a 5 veces el IPREM dependiendo de la situación del núcleo familiar.
De igual manera, deben haber sido afectados por una situación económica imprevista como una enfermedad sobrevenida, pérdida de empleo o aumento considerable de los gastos esenciales.
Por último, es importante que la persona solicitante del amparo no haya encontrado una alternativa habitacional.
Vale decir que todo esto debe ser demostrado con la respectiva documentación que demuestre el estado de vulnerabilidad.
¿Es realmente un amparo a los más vulnerables o un soporte para los okupas?
La suspensión de desahucios, aunque pensada para proteger a personas vulnerables, también ha sido objeto de críticas, pues en algunos casos facilita indirectamente el incremento de la ocupación ilegal de viviendas.
Es así que, durante el último año, se han registrado casos en los que los okupas han explotado las garantías que ofrece esta normativa para obstaculizar su desalojo. Los okupas no están protegidos por este decreto, pero teniendo en cuenta que a veces se trata de mafias organizadas, la falsificación de documentos y pruebas están a la orden del día.
La situación es tan alarmante que, solo en 2024 se denunciaron más de 16.000 ocupaciones ilegales en toda España.
¿Cómo se aprovechan los okupas de la suspensión de desahucios?
Desde que el decreto de suspensión de desahucio entró en vigor, se han notado comportamientos comunes por parte de los ocupantes ilegales para aprovecharse de esto.
Uno de los más comunes es el alegato de vulnerabilidad, pues los okupas intentan declararse como personas en situación vulnerable para acogerse a la suspensión de desahucios, lo que termina retrasando el proceso de desalojo en caso de demostrarlo.
Esto, sumado a que los juzgados de primera instancia suelen enfrentarse a listas de espera largas, termina extendiendo el plazo y la resolución del conflicto mucho más. Situación que le permite a los okupas permanecer más tiempo en la propiedad.
Además, si por alguna razón el ocupante logra falsificar el contrato de alquiler y presentarlo como prueba, la situación empeora, pues dicho contrato deberá ser impugnado, lo que sumaría más tiempo de demora.
¿Cuál es el sector más afectado por la suspensión de desahucio?
No cabe duda que los propietarios de segundas residencias, casas de vacaciones y propiedades en desuso son particularmente los más afectados por esta suspensión de desahucio, en especial si dichas propiedades son víctimas de la ocupación ilegal.
Pues estas propiedades no solo están deshabitadas durante largos periodos, sino que también la legislación actual, al priorizar la protección de personas en situación vulnerable, puede dificultar a los propietarios recuperar sus inmuebles de forma ágil, claro está, para que una persona sea protegida por este decreto debe probar que realmente es vulnerable.
Ahora bien, teniendo en cuenta el decreto de suspensión de desahucio y según el Consejo General del Poder Judicial español, el proceso para recuperar una vivienda ocupada dura entre 6 meses y 2 años, dependiendo de la naturaleza de la ocupación, pero ese tiempo lo puedes reducir a casi nada si contratas la ayuda de una empresa desokupa, pues son expertos en lidiar con este tipo de situaciones y te buscaran la solución en poco tiempo.
¿Qué hacer si ya eres víctima de una ocupación y existe la suspensión de desahucio?
Si tu vivienda ya ha sido ocupada y el decreto de suspensión de desahucio aún está vigente, no te preocupes, tienes acciones que aún puedes ejercer:
Puedes hacer una denuncia rápida
Si detectas la ocupación dentro de las primeras 48 horas, puedes solicitar la intervención inmediata de la policía para desalojar a los ocupantes sin necesidad de un proceso judicial prolongado, pues aquí no se cumplen los requisitos de la suspensión de desahucio por vulnerabilidad.
Procedimiento de desalojo
Si la denuncia la haces fuera del plazo de 48 horas, debes iniciar un procedimiento judicial. Según el artículo 441 del Código Penal, si los ocupantes no pueden justificar su permanencia en el inmueble y su estado de vulnerabilidad, el juez ordenará el desalojo de la vivienda.
Desacredita a los ocupantes
En este tipo de procesos es necesario presentar pruebas que demuestren que los ocupantes no se encuentran en situación de vulnerabilidad y que no tienen derecho legal a permanecer en la vivienda. En especial, porque los okupas no entran dentro de los requisitos de la suspensión de desahucio. Por tanto, tu deber es demostrar que nunca fueron arrendatarios.
En Desokupa Rápido, entendemos lo complicado que puede ser enfrentarse a una ocupación ilegal. Si necesitas asesoramiento legal, te recomendamos contactar con un abogado especializado, pero si lo que buscas es recuperar tu vivienda de forma rápida y efectiva, estamos aquí para ayudarte. No permitas que los okupas sigan aprovechándose de tu propiedad, ponte en contacto con nosotros y solucionaremos tu problema. ¡Estamos a tu disposición!